Si analizas una factura de Lucera, Pepeenergy, o cualquier tarifa indexada podrás darte cuenta que, desde hace unos meses, son de las tarifas más caras en el mercado. Esto no siempre ha sido así. De hecho, en los meses previos a la crisis energética, las tarifas a precio de coste eran de las más competitivas del mercado.
Entender la factura de la luz: esa es la cuestión
Las grandes eléctricas nos han puesto difícil entender la factura de la luz. Sin embargo, tal vez no podemos culparlas, ya que se trata de compañías cuya misión es maximizar sus beneficios. Y no tienen interés en contarnos cómo lo consiguen.
Según lo informa la CNMC, el suministro de electricidad ha sido y aún es el servicio peor valorado por los españoles, debido a sus elevados precios y la falta de claridad en las facturas. La clave para empezar a comprender las razones de estos hechos es explicar cómo funciona el mercado eléctrico.
Las grandes eléctricas compran energía eléctrica en el mercado mayorista a sus 24 precios diferentes por día, es decir, que el coste cambia cada hora. Luego, la revenden a sus clientes asegurándose de obtener su margen de beneficio en cualquier situación. ¿Cómo lo hacen?
El secreto es que compran una cobertura de riesgo a un tercero o trader financiero. Este trader, a cambio de una sustanciosa prima, garantiza un precio máximo de compra a la compañía eléctrica durante un determinado periodo de tiempo. Considerando este sobrecoste, la eléctrica añade su margen de beneficio y te propone una tarifa con precio fijo. Por ende, cuando la energía baja, no esperes que ello se refleje en tu factura. El resultado es que siempre ganan el trader y la eléctrica y, obviamente, pierde el consumidor.
¿Hay alguna forma de evitar tantos intermediarios con ánimo de lucro?
Sí, comprando la energía a precio de coste y recibiendo una factura con una tarifa indexada al mercado mayorista. Con este sistema, puedes obtener un gran ahorro a lo largo del año.
Cabe añadir, para tu información, que en el modelo tradicional el beneficio de la compañía eléctrica aumenta con tu consumo, ya que cargan un margen por cada unidad de energía que utilizas. El método desarrollado por las compañías de luz innovadoras se basa en cobrarte la energía al precio del mercado mayorista y facturar por sus servicios de suministro una pequeña cuota mensual fija, independientemente del volumen de energía que consumas.
¿Existe alguna desventaja al comprar la energía directamente al mercado mayorista?
En todos los ámbitos de la vida hay luces y sombras. Por eso, el plan más inteligente es optar siempre por la alternativa cuyas luces superen ampliamente el lado oscuro. El precio de mercado fluctúa hora a hora y, por lo tanto, con una tarifa indexada observarás ligeras variaciones en el precio reflejado en tu factura por la energía que consumes mes a mes. También, en el caso de subidas en el precio de la luz (como en la actual crisis energética), los hogares con tarifas indexadas o a Precio de Coste, son los primeros en experimentar dichas subidas.
En definitiva, ¿cómo podemos reducir el precio de la electricidad?
Es importante señalar que hay dos principales escenarios: 1) Un escenario en el que los precios de la electricidad fluctúan con cierta moderación o incluso decrecen 2) La crisis energética que azota a Europa desde mediados de 2021. En el primer caso compensará una tarifa indexada ya que el cliente final soporta una volatilidad, y esto se compensa con unos mejores precios a la larga. En el segundo escenario una tarifa indexada puede ser muy peligrosa ya que las subidas en el precio de la luz afectan directamente al bolsillo del consumidor. Con las tarifas fijas existe un decalaje (ya sea porque la eléctrica de turno tiene asegurada la electricidad a un cierto coste o porque hay un contrato en vigor que no permite a la comercializadora repercutir las subidas al cliente).